México tiene una deuda con el caso de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa que aún no está saldada, y el compromiso del Estado es pagarla, dijo este viernes la abogada panameña Esmeralda Arosemena de Troitiño, comisionada y vicepresidenta de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en una entrevista con EFE.
Para la abogada panameña, el caso de Ayotzinapa, que acaba de cumplir nueve años el 26 de septiembre, es paradigmático para la región, pues a raíz de él la CIDH creó nuevas fórmulas para coadyuvar con los Estados y trabajar con grupos de expertos para desarrollar un mecanismo de seguimiento cercano e impulsar la búsqueda de los estudiantes.
“Hoy hay un importante material preparado por el GIEI (Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes), evaluado también por la CoVAJ (Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia), todas esas instituciones se han creado en la búsqueda de mejores respuestas”, dijo.
La experta consideró que el actual llamado del organismo es para “asegurar la justicia” en el caso y, para ello, las fiscalías especiales tienen que trabajar de una manera “especializada y comprometida” para aprovechar la información existente y llegar a la justicia.
“Sé que hay un número importante de personas detenidas, hay un número importante de documentación para trabajar”, reconoció.
“Hay cosas con las que se puede continuar una investigación, con el compromiso de que necesitándose otra información se pueda tener”, agregó.
Aseguró que, por ello, todas las instituciones tienen la responsabilidad de esclarecer los hechos.