Habían pasado 24 horas pero pareció que el tiempo se detuvo en ese lugar, toneladas de piedra y tierra se vinieron abajo de una altura de aproximadamente 40 metros, a su paso se llevó tres casas completas y al menos cinco con afectaciones, que las hacen inhabitables. Para comenzar el acceso a esa parte de la colonia Altavista en Cuernavaca, es por medio de 150 escalones, cerca de la barranca, el grupo de vecinos había trabajado durante la noche y no avanzaron nada.
Hasta allí llegó una brigada de Protección Civil de Cuernavaca, pidió a los ciudadanos esperar una evaluación de la autoridad para que pudieran ingresar al plan de emergencia.
Los pobladores, hicieron caso omiso, querían liberar las escaleras de otras casas que se ubican más arriba y el acceso hacia la otra parte de la barranca. «Nadie nos ha venido ayudar desde ayer, porque se han tardado tanto, nos hace falta agua, comida y herramientas.
Con marros, algunos picos y sus manos buscaron remover enormes rocas, usaron palas para retirar la tierra, y romper los bloques de loza de las casas. El personal de protección civil les insistió que no pusieran en riesgo sus vidas; los hombres con el apoyo de otros vecinos no hicieron caso, con el pendiente de que toda la tierra sería aventada en la barranca de desagüe que pasa por el lugar y provocar posteriormente un taponamiento.
